Foursquare es una red social donde las personas comparten su ubicación con sus contactos, seguidores o amigos desde un teléfono móvil (con necesaria conexión a Internet).
A través de un sistema de GPS, al abrir la aplicación, de adquisición gratuita, y si el usuario acepta, el sistema detecta la ubicación exacta.
Mediante las interacciones entre los distintos usuarios, se va creando una base de datos de lugares sobre los que se puede comentar, por ejemplo, sobre recomendaciones sobre qué hacer en ese lugar.
Así, puedes elegir entre un lugar u otro, en función de las opiniones que tengan, así como para saber qué contactos están cerca para poder encontrarse.
La conexión con otras redes sociales, como Facebook o Twitter, es completa: se pueden importar los contactos de ambas, así como de otras plataformas como Gmail.
Foursquare es un buen ejemplo del nuevo «prosumidor»: el consumidor una vez será usuario de la información y en otras ocasiones, hará las veces de colaborador aportando opiniones.
Así, Foursquare ayuda a los usuarios a encontrarse con sus amigos, ganar puntos y reconocimientos por descubrir lugares, hacer cosas nuevas y conocer gente nueva. Esto se consigue gracias a la interacción de los usuarios con el sitio, así como la base de datos que se va creando entre todos. Está planteado como un juego, ya que a través de su sistema de puntos, fomenta en los usuarios la participación.
Los usuarios se divierten, es el secreto en el que todos los expertos como Enrique Dans, profesor de Sistemas de Información en IE Business School, coinciden.
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